En recuerdo de José Manuel Maza

Son varias las razones que me han impedido publicar en el blog en las últimas semanas con la regularidad conveniente. Existen situaciones en las que me veo impulsado a usar esta ventana para ocuparme de asuntos imprescindibles, como siento que es el recuerdo debido al recientemente fallecido Fiscal General del Estado, D. José Manuel Maza Martín.

 

Desde que se tuvo noticia de su fallecimiento en Buenos Aires, han sido múltiples los testimonios publicados glosando su personalidad y su recorrido profesional y haciendo evidente que hemos perdido a un gran jurista. Mi conocimiento de José Manuel Maza fue ocasional y limitado, pero me siento gustosamente obligado a recordarlo.

 

Había coincidido con José Manuel Maza (a la sazón Magistrado de la Sala Segunda del Tribunal Supremo) en algunos congresos profesionales y académicos dedicados a las reformas legislativas y a las resoluciones judiciales en las que aspectos jurídico-mercantiles se ven afectados en creciente medida por disposiciones penales. Así sucedió con, por ejemplo, el debate en torno a las pólizas de seguro de responsabilidad civil y su validez en el marco de los procedimientos penales. En esta materia, José Manuel Maza había participado en distintas sentencias dictadas por  el Tribunal Supremo, formulando algún voto particular que expresaba el debate que la cuestión había suscitado en el Alto Tribunal [a título indicativo, puede consultarse la Sentencia de 25 julio de 2014 (RJ 2014/4165)]. Al escuchar la exposición de Maza, me pareció admirable la ponderación y el equilibrio con los que exponía el problema,  justificaba su posición discrepante y aceptaba el criterio mayoritario.

 

Esa impresión se vio especialmente reforzada con motivo de una iniciativa surgida a partir de la colaboración entre nuestra Facultad y el Despacho Latham & Watkins, en forma de seminario conjunto destinado a abordar temas relevantes para la vida jurídico empresarial. La primera edición del Seminario la dedicamos a una cuestión entonces de actualidad y que expresaba esa confluencia de cuestiones mercantiles y penales: “Persona jurídica y delito: el Código Penal entra en la sala del consejo de administración”. A esa ocasión dediqué una entrada bajo el título Derecho penal y consejo de administración.

 

Cuando José Luis Blanco (socio director de Latham Watkins) propuso entre los ponentes invitados a José Manuel Maza, nos pareció una magnífica idea. Recuerdo con agradecimiento la satisfacción con la que Maza aceptó nuestra invitación, recordando su paso como estudiante por la Facultad a la que regresaba como destacado y reconocido jurista.

 

La participación en el Seminario que tuvo lugar el pasado 1 de julio de 2016 confirmó sus virtudes. Como jurista, resulta ocioso exponerlas tras el aluvión de testimonios autorizados que lo han hecho en esta última semana. Lo que debo recordar es la grata impresión que nos dejó al compartir sus dudas y certezas sobre la materia debatida. Ante cuestiones complejas de nuestro ordenamiento, aplicaba el mismo rigor e interés a exponer sus ideas y tesis y a escuchar las ajenas. Lo hacía con la combinación de afabilidad, inteligencia y modestia propias de los grandes juristas.

 

Descanse en paz.

 

Madrid, 28 de noviembre de 2017