El pasado 18 de julio de 2018, el Financial Reporting Council (FRC) hizo pública la nueva versión de su UK Corporate Governance Code, que entrará en vigor el 1 de enero de 2019. La nueva versión del Code puede obtenerse en la web del FRC, en la que aparecen otros materiales interesantes. De la importancia del modelo británico en esta materia ya he advertido en anteriores y repetidas entradas, en especial al hilo de los actos preparatorios más decisivos de esta nueva versión.
El Code mantiene una estructura sencilla dividida en cinco apartados, que encabezan los correspondientes principios y completan las disposiciones correspondientes (formato similar al que presenta nuestro Código de Buen Gobierno). Para la valoración general de lo que significa este reciente paso, me encuentro con un interesante artículo de Peter Bailey, “It looks like corporate governance is starting to toughen up (at last)”, en la Company Law Newsletter (Issue 409, 15 de agosto de 2018), cuyas conclusiones reproduzco:
“According to the FRC, the main changes in the 2018 edition of the Code include the following:
– on the workforce and stakeholders is a new Provision to enable greater board engagement with the workforce to understand their views: the Code asks boards to describe how they have considered the interests of stakeholders when performing their duty under s.172 of the Companies Act 2006;
– boards are asked to create a culture which aligns company values with corporate strategy and to assess how they preserve value over the long term;
– to ensure that boards of directors of listed companies have the right mix of skills and experience, constructive challenge and to promote diversity, the Code emphasises the need to refresh boards and undertake succession planning, e.g. boards should consider the length of term that the chair remains in post after nine years. The Code further strengthens the role of the nomination committee on succession planning and establishing a diverse board, identifying the importance of external board evaluation for all companies. Nomination committee reports should include details of the contact the external board evaluator has had with the board and individual directors; and
– because of public concern over executive remuneration, the Code emphasises that remuneration committees should take into account workforce remuneration and related policies when setting director remuneration. Formulaic calculations of performance-related pay should be rejected and remuneration committees should apply discretion when the resulting outcome is not justified.”
Se advierte de esa transcripción la importancia que para la delimitación de los deberes de los administradores supone el contenido del artículo 172 de la Companies Act 2006, de manera que el informe correspondiente permita a los accionistas de cada sociedad valorar cómo están aplicando los administradores los criterios que en aquella disposición se mencionan con vistas al “success of the company” que todo administrador debe promover. Existe una evidente conexión con algunos contenidos esenciales del proyecto legislativo de la Senadora Elizabeth Warren que cité en una previa y cercana entrada.
Al margen de su labor influyente en relación con el gobierno corporativo de las grandes corporaciones, el modelo británico cuenta con el argumento de autoridad que resulta de su carácter pionero y de ser el surgido en uno de los principales mercados financieros del mundo, de forma que su contenido refleja la experiencia de éstos y trata de hacer frente a los episodios más negativos (algunos de ellos los recuerda expresamente el FRC) para la confianza general en esos mercados y en la correcta administración de las sociedades allí presentes.
Madrid, 11 de septiembre de 2018